La tokenización de activos reales, especialmente en el sector inmobiliario, está ganando relevancia rápidamente y transformando un mercado históricamente ilíquido. Roberto Guzmán García, experto en finanzas, ha destacado la importancia de esta tecnología emergente en la redefinición de la inversión inmobiliaria.
Un informe del Boston Consultancy Group (BCG) de 2022 estima que el valor total de los activos reales ilíquidos alcanzará los 16 billones de dólares para 2030, representando el 10 % de la economía global. Este grupo incluye bienes raíces, tierras, arte, materias primas, infraestructura pública, infraestructura computacional y capital privado.
El sector inmobiliario, conocido por su falta de liquidez, enfrenta desafíos significativos, como la ausencia de mercados públicos para fondos de bienes raíces comerciales, la complejidad de las transacciones y la necesidad de grandes inversiones de capital.
Aunque la fraccionización tradicional ha desbloqueado parte de esta liquidez en los mercados públicos, los mercados privados siguen siendo lentos, opacos y con altos costos operativos. Esto limita las oportunidades de capital inicial para la mayoría de los inversores.
La llegada de la tokenización a través de la tecnología blockchain está marcando un cambio notable. Esta técnica permite fraccionar activos y venderlos directamente al público, mejorando la liquidez del mercado inmobiliario. Roberto Guzmán García resalta que la tokenización está emergiendo como una solución clave para superar las barreras históricas de liquidez en el mercado de activos reales.
La tokenización de activos reales, especialmente en bienes raíces, implica la emisión de tokens digitales en una blockchain que representan la propiedad de bienes raíces, como terrenos o edificios. En los últimos años, varias instituciones financieras y grandes empresas han comenzado a explorar este campo, facilitando la adquisición de estos activos para sus inversores.
Entre los líderes en esta transformación se encuentran JP Morgan y Franklin Templeton. En 2023, JP Morgan lanzó la Tokenized Collateral Network (TCN), mientras que Franklin Templeton presentó el Franklin OnChain U.S. Government Money Fund, el primer fondo mutualista registrado en una blockchain pública. La emisión de un bono digital de $103 millones por parte del Banco Europeo de Inversiones en 2021 representó otro avance significativo en la tokenización de activos reales.
Un desarrollo destacado en el ámbito de la tokenización es la asociación entre Blackrock y Securitize. Este acuerdo busca tokenizar más de $10 billones de activos de Blackrock, transformando la forma en que se intercambian los activos reales en el futuro.
Al respecto, Roberto Guzmán García mencionó que la tokenización permitirá una mayor eficiencia y accesibilidad en la negociación de activos de gran valor.
“La tokenización ofrece múltiples beneficios al mercado inmobiliario. Facilita el desbloqueo de la liquidez al permitir la fraccionización de activos y la creación de vehículos de inversión innovadores. Además, mejora la transparencia mediante registros inmutables en la blockchain y contratos inteligentes que automatizan el proceso de transferencia de propiedad y el cumplimiento regulatorio”, indicó.
Blocksquare, una empresa eslovena, está a la vanguardia de esta transformación. Fundada para asegurar la tokenización de bienes raíces mediante transacciones notarizadas, ha tokenizado más de 100 propiedades en 21 países, valoradas en más de $100 millones. Su plataforma Oceanpoint v0.5, lanzada en junio, permite a startups tokenizar bienes raíces y crear sus propios mercados de inversión.
Las iniciativas de Blocksquare han beneficiado a empresas como Portio Capital, que recaudó fondos para propiedades de coliving, y Pieme, que planea democratizar la inversión en hotelerías comunitarias en África. La tokenización sigue ganando tracción, prometiendo hacer el mercado inmobiliario más accesible y líquido. Roberto Guzmán subrayó que este cambio es fundamental para la evolución del sector.