Los precios mundiales de los alimentos ascendieron en noviembre pasado a su mayor nivel desde diciembre de 2014, comunicó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El índice de precios de los alimentos de la FAO es una medida de la variación mensual de los precios internacionales de una canasta de productos alimenticios.
El aumento de noviembre no solo constituyó la mayor subida intermensual desde julio de 2012, sino que también dio lugar a que el índice alcanzara su nivel más elevado desde diciembre de 2014. Todos los subíndices registraron aumentos en noviembre, siendo el subíndice de los aceites vegetales el que más subió, seguido por los del azúcar, los cereales, los productos lácteos y la carne.
Aumento de cereales, carne, lácteos, azúcar y aceite
Según la FAO, en noviembre subieron los precios de todas las categorías de productos, aunque los aceites vegetales mostraron el mayor aumento: el índice de sus precios creció un 14.5% durante el mes.
El índice de precios de cereales tuvo un aumento modesto del 2.5% respecto a octubre, y un avance interanual del 19.9 por ciento.
Los precios del trigo fueron impulsados por «perspectivas reducidas para la cosecha» en Argentina, mientras que los del maíz fueron apuntalados en parte por pronósticos de una producción menor en Estados Unidos y Ucrania. Los del arroz se mantuvieron.
Mientras que el índice de precios de los productos lácteos aumentó un 0.9%, al aproximarse al nivel más alto de los últimos 18 meses.
También se elevó un 0,9% el índice de precios de la carne desde octubre pasado, que a la vez está 13.7% por encima de su valor de noviembre de 2019.
Los valores promedio del azúcar subieron un 3.3% desde octubre frente al temor a déficits futuros en la producción global, con condiciones climáticas adversas para las perspectivas de los campos de la Unión Europea, Rusia y Tailandia.