El presidente Andrés Manuel López Obrador informó ayer que se llegó a un acuerdo con las empresas Minsa y Maseca para evitar que aumente en enero del próximo año el precio de la tortilla.
Otros productos y servicios que no aumentarán de precio a la entrada del año nuevo serán las gasolinas y combustibles, según el presidente. Aclaró que los incrementos de precios que percibirán los energéticos tienen que ver con los ajustes por la inflación que se harán al Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios. Este ajuste también afectará a bebidas azucaradas, como refrescos, y a los cigarros. El aumento de este impuesto rondará el 3%.
En la conferencia de prensa matutina, el presidente declaró:
Aquí vamos a informar mañana para que no haya abusos de los refrescos, es solo inflación, 3% y no en todo. En el caso, por ejemplo, de la tortilla no hay aumento, hay un acuerdo con ese propósito, tanto con Maseca, como con Minsa.
Actualmente, el precio promedio de la tortilla en la ciudad de México ronda los 13.8 pesos por kilo, aunque su valor depende de la entidad del país donde se adquiera, ya que en estados como Sonora o Baja California Sur, el precio de este producto puede alcanzar hasta los 20 pesos.
Asimismo, en los últimos días, Ricardo Sheffield, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), coincidió en que no ha habido aumento en los energéticos y, por lo tanto, no es necesario un incremento al precio de este alimento.
«Ha estado por abajo del promedio de la inflación, por tanto eso es un factor importante en la elaboración de la tortilla».
Ricardo Sheffield descartó que en Profeco tengan indicaciones de que vaya a haber un aumento a la harina de maíz nixtamalizada. «Si no ha aumentado nada, ¿por qué van a subirlo?», cuestionó.