La empresa Aeroméxico ayer concluyó su proceso de reestructuración bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, valuado en 2 mil 564 millones de dólares, por ende, la aerolínea dejó atrás la bancarrota.
Para salir de la quiebra primero pidió un préstamo y para diluir 682 millones de acciones y creó 682 billones de nuevas acciones; segundo, los nuevos inversionistas inyectaron cerca de 750 millones de dólares; Apollo Global Management se quedó con el 22.38% de la participación; Delta Air Lines tiene el 20%; y los accionistas mexicanos se quedaron con el 4.10%.
Tras este amargo trago, la compañía anunció una inversión de 5 mil millones de dólares para comprar otros 22 aviones, y así terminará con unas 147 aeronaves en operación.
Fuente: Money Brief