El presidente Joe Biden pidió al Congreso suspender los impuestos federales para gas y gasolina con el fin de solucionar la crisis financiera por los precios tan altos que están viviendo los estadounidenses.
El impuesto que Biden quiere suspender, durante tres meses, es el impuesto federal de $18.4 céntimos por galón de gasolina y del impuesto federal de $24.4 céntimos por galón de diesel; y así, los consumidores ahorrarían aproximadamente un 3.6%.
Medios internacionales señalan que, de entrada, todos los congresistas republicanos se oponen a la medida, pero incluso varios líderes demócratas. Nancy Pelosi, la líder demócrata en la Cámara de Representantes, no le dio todo su apoyo a la iniciativa, mientras que varios analistas económicos la consideran súper ingenua.
Fuente: Money Brief