México, 5 julio.- Si bien las empresas de tecnología financiera aún no son una amenaza para instituciones bancarias tradicionales, durante la pandemia sí han presentado una gran aceleración, según el informe que la calificadora Fich Ratings presentó en días pasados. Lo que para el especialista mexicano Alexis Nickin Gaxiola, es muestra de que serán un motor importante para mejorar la economía en la región de América Latina.
“El ritmo de digitalización que la pandemia dictó, ha obligado a que incluso los bancos hagan inversiones fuertes en tecnología financiera. Esto, ha beneficiado ampliamente al ecosistema Fintech propiciando su expansión, generando nuevos mercados y desde luego, ofreciendo servicios mejorados y especializados que promueven la inclusión financiera”, afirma Nickin Gaxiola.
De acuerdo con el Índice de Inclusión Financiera Findex del Banco Mundial, hasta antes de la pandemia eran 1.700 millones de personas en todo el mundo, es decir, alrededor del 30% de la población adulta, los que se encontraban excluidos del sector financiero.
Siendo las mujeres, poblaciones rurales, desempleados y trabajadores de la economía informal, los principales sectores segregados, el panorama para la región de América Latina era menos alentador, pues en promedio, únicamente el 55% de la población de adultos latinoamericanos contaban con una cuenta en alguna institución financiera.
Fomentar la inclusión financiera
«El ecosistema Fintech se ha diferenciado desde sus inicios, por buscar acercar soluciones financieras a los sectores marginados por el sistema económico tradicional. Eso, es fomentar la inclusión financiera. La pandemia fue el impulso que se necesitaba para que más mujeres, productores, personas en la economía informal y demás sectores poblacionales olvidados, pudieran acceder a servicios de bancarización”, destaca el especialista mexicano.
No obstante, Alexis Nickin señala que el acceso es el primer paso hacia la inclusión financiera y el siguiente paso, será eliminar determinadas barreras en cuanto a restricciones, comisiones elevadas e inclusive, educación financiera para todos los sectores.
“Latinoamérica lidera a nivel global, el desarrollo Fintech. Que países como Colombia, México y Brasil se mantengan entre los principales de la región, es un indicio de que la región busca innovar, mejorar y avanzar hacia modelos económicos mucho más rentables e inclusivos”, puntualiza Nickin Gaxiola.
“Sí vemos en la tecnología financiera un motor importante para mejorar la economía de la región. Para conseguir ese objetivo que podríamos fijarlo a un plazo de entre cinco y 10 años, será necesario mantener la digitalización, fomentar el acceso a educación financiera, trabajar en marcos regulatorios equitativos y dar paso a modelos económicos innovadores bajo un enfoque sostenible”, concluyó .