México se perfila como el país más beneficiado del nearshoring a nivel global, debido a su ubicación privilegiada, su estrecha relación comercial con Estados Unidos y la solidez de su cadena logística, misma que demostró resiliencia durante la pandemia.
“México va a ser el país más beneficiado dentro de todo el globo terráqueo de estas negociaciones y guerra de tarifas. Tenemos una posición privilegiada con 3 mil 500 kilómetros de frontera con Estados Unidos y un intercambio comercial que no se borra en tres meses ni en tres años”, señaló Gonzalo Robina, miembro propietario del Consejo Técnico de Fibra Next.
Respecto al T-MEC, junto con Raúl Gallegos, director general de la fibra, los directivos aseguraron que no ven riesgo de una cancelación del acuerdo, sino una revisión puntual con ajustes específicos en sectores sensibles como migración y seguridad. “No se trata de una renegociación desde cero, sino de afinar el lápiz. El tratado va a subsistir y México saldrá fortalecido”, afirmaron.
Destacaron además que, los fundamentos estructurales que favorecen al país siguen vigentes: Bajos niveles de desempleo, cercanía geográfica con Estados Unidos, mano de obra competitiva y un entorno geopolítico que favorece la regionalización de cadenas productivas.
“Estados Unidos necesita que México fabrique lo que ellos ya no pueden producir a bajo costo. Somos su socio ideal”, apuntaron.