De acuerdo con el Índice de Competitividad Estatal 2025, elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), los cinco estados con mayor diversificación económica en México son Ciudad de México, Estado de México, Jalisco, Veracruz y Puebla.
Estas entidades destacan por contar con una amplia variedad de sectores productivos, lo que les permite reducir riesgos económicos y adaptarse mejor a cambios estructurales o coyunturales del mercado.
La Ciudad de México se posiciona como la entidad con la mayor diversificación económica del país, con un total de 943 sectores presentes en su economía. Esta característica le otorga una estructura productiva resiliente y flexible, además de facilitar la atracción de inversión y talento especializado en múltiples industrias.
El Estado de México, con 894 sectores, ocupa el segundo lugar nacional. Su cercanía con la capital del país y su infraestructura logística le permiten vincularse con diversas cadenas de valor en manufactura, comercio y servicios, consolidando su rol como motor económico del centro del país.
Presencia multisectorial en regiones estratégicas
Jalisco se ubica en la tercera posición con 884 sectores, impulsado por un ecosistema que combina tecnología, manufactura avanzada, agroindustria y turismo. Esta mezcla ha sido clave para atraer inversiones extranjeras y fomentar la innovación regional.
Veracruz, en el cuarto lugar con 882 sectores, destaca por su diversidad natural y geográfica, lo que le permite participar en industrias como energía, logística portuaria, agricultura, petroquímica y comercio. Esta pluralidad productiva le brinda un papel estratégico en la costa este del país.
Puebla, con 881 sectores, completa el grupo de los cinco estados con mayor diversificación. La entidad mantiene una base sólida en la industria automotriz y textil, al tiempo que desarrolla capacidades en sectores como electrónica, alimentos y servicios financieros.