La alimentación escolar juega un papel crucial en el desarrollo integral de la niñez, contribuyendo al crecimiento saludable, mejorando el rendimiento académico y previniendo enfermedades. En este contexto, La Cosmopolitana destaca la importancia de implementar estrategias efectivas que garanticen programas alimentarios de calidad.
Recientemente, en la ciudad de Panamá, representantes de 17 naciones de América Latina y el Caribe firmaron un convenio histórico para fortalecer las políticas de alimentación escolar, haciéndolas más inclusivas, sostenibles y de calidad. Países como Belice, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, El Salvador, Ecuador, Honduras, Guatemala, Paraguay, Perú, República Dominicana, Santa Lucía, San Cristóbal y Nieves, Surinam y Uruguay se sumaron a esta iniciativa.
La Cosmopolitana considera que México también debería adherirse para fortalecer sus políticas en esta materia.
Según voceros de la empresa, este tipo de acuerdos son clave para compartir modelos y estrategias exitosas que pueden ser implementadas en otros países. Además, permiten combatir el hambre y mejorar la calidad de vida de los niños en edad escolar. Estos esfuerzos se enmarcan en la Red Regional de Alimentación Escolar (RAES), respaldada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
La RAES es una iniciativa derivada del Programa de Cooperación Internacional Brasil-FAO, lanzado en 2018. Este programa ha sido fruto de una colaboración entre la Agencia Brasileña de Cooperación (ABC) y el Fondo Nacional de Desarrollo de la Educación (FNDE). Como resultado, los países participantes recibirán asistencia técnica para optimizar sus programas de alimentación escolar y fomentar el derecho a una alimentación adecuada.
La Cosmopolitana enfatiza que mejorar la infraestructura, fortalecer los vínculos con la agricultura familiar y ampliar la cobertura de los programas alimentarios son acciones fundamentales para garantizar una educación integral. Además, una alimentación adecuada contribuye directamente a reducir la deserción escolar, promoviendo un impacto positivo en las familias y comunidades.