El gobierno mexicano, a través de la Secretaría de Economía, emitió un Decreto Presidencial que establece medidas arancelarias temporales a productos importados provenientes de países que carecen de acuerdos comerciales con México.
Este es un movimiento destinado a impulsar la economía interna y salvaguardar los intereses de las pequeñas y medianas empresas.
Esta acción busca proteger a las Pymes y el empleo que generan, promoviendo el desarrollo de la industria nacional. Respalda el mercado interno y fortalece la participación de los productos nacionales en las cadenas de valor.
Abugaber Andonie, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin), aseguró que estas medidas no tienen un carácter proteccionista. Además no afectarán a los consumidores mexicanos.
Estrategia
La postura oficial es que se trata de una medida estratégica para nivelar el campo de juego. Ello propiciar la competencia en condiciones más equitativas.
El Decreto, publicado el pasado martes en el Diario Oficial de la Federación (DOF), detalla aranceles temporales que oscilan entre el 5% y el 25% para una amplia gama de mercancías.
Estos productos incluyen acero, aluminio, bambú, caucho, productos químicos y aceites. Jabón, papel, cartón, productos cerámicos, vidrio, material eléctrico e instrumentos musicales. Muebles, textiles y calzado, entre otros.
Juan Antonio Reboulen, presidente de la Comisión de Comunicación y Vinculación Política y de la Comisión de Aduanas de CANACERO, expresó que esta medida es una respuesta a una larga batalla que ha librado el sector siderúrgico mexicano por una política industrial justa y equitativa.
Destacó que esta acción se dirige principalmente contra competidores que han operado en el mercado mexicano durante años. Pero sin estar sometidos a las mismas condiciones de competencia.
Reboulen enfatizó cómo las subvenciones no permitidas por las economías de mercado han afectado los sectores industriales locales.
Fuente: mexicoindustry.com